Durante tres días he estado capacitando al profesorado de Educación Infantil y Primaria del colegio Sagrado Corazón de Vallecas (Asociación P. Pulgar) sobre el programa de educación y competencia emocional en la infancia "Emoticantos".
Los dos primeros días hemos aprendido los fundamentos psicológicos y pedagógicos del programa, ayudados del manual docente que tenemos diseñado para ello. Y también hemos ido trabajando las 12 canciones básicas de todo el programa (3 canciones por cada una de las 4 dimensiones de la Inteligencia Emocional).
Hemos aprendido y compartido experiencias, emociones, dinámicas y juegos, y muchas ideas que se nos iban ocurriendo durante el curso: puedo afirmar que son un equipo de docentes muy creativo y comprometido con su misión educativa.
El último día lo hemos dedicado a hacer una programación para el curso que viene, a partir de los "desempeños" o indicadores competenciales asignados a cada una de las canciones. Lo hemos hecho siguiendo una secuencia pedagógica en tres fases: EXPERIENCIA - REFLEXIÓN - APLICACIÓN. Para cada uno de los indicadores elegidos para el curso que viene (al menos uno por cada dimensión de la competencia), hemos diseñado tres actividades diferentes, ya que los desempeños se entrenan y aprenden-comprenden mejor en la medida que los ponemos en escena en diversas situaciones.
Y como final de fiesta, porque hemos celebrado nuestro aprendizaje compartido con emoción e ilusión, hemos representado juntos la canción "Mi corazoncito" a otros compañeros de cursos superiores que estaban a su vez en otro taller formativo sobre Aprendizaje Cooperativo. ¡En fin que ha sido una gozada trabajar con vosotros y vosotras!
Y esto no termina aquí, en septiembre volveré para un taller Emoticantos con las familias, porque este programa tiene más sentido y fuerza si también se trabaja en casa y se refuerza desde casa.
Es siempre una "Buena Noticia" que un centro educativo se ocupe y preocupe por la Educación Emocional de su alumnado y sus familias, ya que ello es la base de muchas cosas, como la buena convivencia, las relaciones humanas, los valores humanos, la felicidad humana, y también el sentido de la vida y la espiritualidad.
César Gª-Rincón de Castro
Los dos primeros días hemos aprendido los fundamentos psicológicos y pedagógicos del programa, ayudados del manual docente que tenemos diseñado para ello. Y también hemos ido trabajando las 12 canciones básicas de todo el programa (3 canciones por cada una de las 4 dimensiones de la Inteligencia Emocional).
Hemos aprendido y compartido experiencias, emociones, dinámicas y juegos, y muchas ideas que se nos iban ocurriendo durante el curso: puedo afirmar que son un equipo de docentes muy creativo y comprometido con su misión educativa.
El último día lo hemos dedicado a hacer una programación para el curso que viene, a partir de los "desempeños" o indicadores competenciales asignados a cada una de las canciones. Lo hemos hecho siguiendo una secuencia pedagógica en tres fases: EXPERIENCIA - REFLEXIÓN - APLICACIÓN. Para cada uno de los indicadores elegidos para el curso que viene (al menos uno por cada dimensión de la competencia), hemos diseñado tres actividades diferentes, ya que los desempeños se entrenan y aprenden-comprenden mejor en la medida que los ponemos en escena en diversas situaciones.
Y como final de fiesta, porque hemos celebrado nuestro aprendizaje compartido con emoción e ilusión, hemos representado juntos la canción "Mi corazoncito" a otros compañeros de cursos superiores que estaban a su vez en otro taller formativo sobre Aprendizaje Cooperativo. ¡En fin que ha sido una gozada trabajar con vosotros y vosotras!
Es siempre una "Buena Noticia" que un centro educativo se ocupe y preocupe por la Educación Emocional de su alumnado y sus familias, ya que ello es la base de muchas cosas, como la buena convivencia, las relaciones humanas, los valores humanos, la felicidad humana, y también el sentido de la vida y la espiritualidad.
César Gª-Rincón de Castro